domingo, 25 de abril de 2010

Largamente te sueño,
por mis ríos subterráneos
y por las aristas de mi geografía
con los ojos despiertos
y con los recovecos dormidos
del recuerdo enquistado.

Te sueño en cada paso,
con la luz del alba
y con el color de las tardes.

Te sueño en cada gesto de mi memoria,
en cada gesto veo tu nombre
y con tu nombre
mi saliva se espesa
y se cierra mi garganta.

Tal es el efecto de tu nombre.

A veces te sueño vivo
paseando tu lacerante existencia,
tu esencia de otredad
inalcanzable y despojada.

Muerto te sueño a veces,
como moriste en mi boca
cuando los besos atormentados
me dijeron que habías muerto.

En cada momento te sueño.
Pero no te resucito.
Te prefiero en la certeza de la distancia,
en la necesidad de tu muerte.
Te quiero sabiéndote lejos
sin otra alternativa que el silencio,
sin otra perspectiva que tu sombra,
ajena y extraña.

No te resucito.
No.
Te sueño en la niebla de mis sueños
y en la música que quedó en mis oídos.

Así te sueño.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No percibimos las cosas tal y como son. La realidad se nos escapa a cada momento y con dificultad intuimos diminutos fragmentos de ella, apenas lo justo para mantener ese nexo vital para la supervivencia. Cuando nuestra mirada se abre vemos nuestras cotidianas estrecheces, pero suele ser fugaz y doloroso. Vivimos como en prolongados sueños veteados por breves despertares.
En estas líneas "largamente soñadas" por ti se diluye la frontera entre la muerte y la vida y los sueños se aproximan brumosamente a la realidad, con efectos si cabe aun más contundentes. Muerte o resurrección, cercanía o distancia dejan de oponerse para ser casi complementarios, e incluso intercambiables. Ese es el poder de tu palabra.

Un abrazo.

Juande.

zaxanaercis dijo...

Querido Juande,siento una gran
alegría al leerte de nuevo. Otra
vez muchas gracias,gracias por esas
hermosas palabras que me dedicas
y por el aliento que me transmiten.
Un día seré yo quien lea lo que tú
escribes, porque tengo casi la
certeza de que lo haces.
Un gran abrazo, amigo.