viernes, 15 de mayo de 2009



No te equivoques.
Los fragmentos de esperanza que buscas
no son sino palabras de diccionario.
No la busques.
Simplemente no existe.
Si quieres,
lánzate al vértigo,
sumérgete en el fondo de las aguas,
rompe muros y cristales.
Desnúdate. Vive sin coartadas.
Pero no esperes nunca.
No esperes nada.
Aquello que ansías
es sólo el brillo engañoso
de una estrella que se apagó
hace miles de años.

1 comentario:

PCR dijo...

Querida Zaxanaercis, tenemos que luchar para que el puzzle se recomponga. Debemos abrir bien los ojos. ¿Te imaginas que por no estar atentos, la estrella nos pasa inadvertida?
El sábado es pasado mañana!